jueves, 9 de marzo de 2017

¿Libro o película? Yo, él y Raquel


¡Hola a todos! Hoy, como podéis ver por el título os traigo una nueva sección que llevo mucho tiempo queriendo hacer. Y ahora que estoy en una época en la que tengo un poquillo más de tiempo, me apetecía traeros al blog algo que no sean solo reseñas, que últimamente es lo único que hago.
Pues bien, como últimamente parece que está a la orden del día adaptar historias ya escritas y publicadas a la gran pantalla, he decidido abrir esta nueva sección para hacer una comparativa de todas aquellas que he leído el libro y he visto la película. Así os puedo dar mi opinión de ambas, comentaros que cosas me han gustado o no, si la película es fiel al libro o ni se le parece y lo más importante, con qué me quedo, ¿con el libro o con la película?

Para empezar comentaros que en un principio el libro se llamó Un final para Rachel, pero como suele ocurrir en estos casos, se ve que a los traductores de la película no les llegó a convencer y la tradujeron literalmente del inglés (Me and Earl and the Dying Girl) como Yo, él y Raquel, título que personalmente no me gusta nada, pero qué le vamos a hacer. Así que la editorial, para no confundir al personal y que la gente asociara bien ambas historias, decidió reeditar el libro con el nuevo título de la película. Por eso si veis dos portadas idénticas pero con distinto título, ya sabeis por qué es.

Pues bien, la historia trata de Greg, un chico un poco peculiar que ha decidido no hacer amigos en el instituto para así no encasillarse en un grupo y evitarse problemas con los demás. Es decir, que el tío va por ahí saludando a todo el mundo y llevandose bien con todos pero sin llegar a establecer nunca verdaderas conversaciones para evitarse así generar amistades que le lleven a problemas futuros, lo que es bastante extraño, sí. La única excepción es su amigo Earl, un chico tanto o más extraño que él y con el que lo comparte todo desde que eran niños, pero sobre todo su afición por el cine, que los ha llevado a convertirse en directores caseros y a grabar decenas de películas, a cada cuál más excéntrica.


El caso es que a Raquel, una compañera del instituto, le han diagnosticado leucemia y la madre de Greg quiere que pase tiempo con ella para darle apoyo moral y que se sienta querida. Pero lo peor de todo es que Raquel ni siquiera es su amiga y ahora va a tener que conocerla y soportarla justo cuando está enferma.

En cuanto a la novela, nos encontramos con una historia mucho más peculiar y caótica en la que todo gira alrededor de Greg y sus pensamientos e ideas extrañas. Es decir, no se centra demasiado en contar la enfermedad de Raquel ni como va evolucionando, sino que vamos conociendo pequeñas pinceladas cada vez que ambos quedan y se ven, y además no en gran medida, pues ambos tienen una filofosía de tratar la enfermedad como algo sin importancia que se encuentra en segundo plano. Además Raquel es un punto importante, pero no el que más, ya que su mejor amigo Earl sí es con el que lo comparte todo, sobretodo los diálogos tan subrealistas que se montan.

Por otro lado, en la película nos encontramos con una historia un poco más comercial (como es lógico y normal) en la que la trama se centra en la relación de amistad entre Greg y Raquel y en mostrarnos la evolución de su enfermedad y todo lo que sienten a causa de ella ambos y su entorno. Como ya leí una vez por ahí y con toda la razón del mundo, podríamos comparar este metraje como una mezcla entre Las ventajas de ser un marginado y Bajo la misma estrella, pero con un toque muy personal que le da a la película un aire más alternativo, haciendo que sintamos la historia mucho más cercana.

Como véis, estamos ante una película que en vez de retratar fielmente la historia contada en la novela, ha tomado una idea general de lo que ocurría en el libro para construir algo más llamativo y sentimental que gustara a los espectadores. Y es que en el libro encontrábamos todo tipo de recursos, desde supuestos diálogos que se imaginaba Greg en su cabeza hasta estrategias de seducción fallidas, que hacían de esta una novela mucho más divertida. Mientras que en la adaptación, a pesar de no ser un gran dramón, nos encontramos una ambientación mucho más triste y melancólica.

De todas formas y pese a que haya una gran diferencia entre ambas en cuanto al rumbo que coge la trama, creo que las dos han conseguido mostrar perfectamente cuál era el mensaje y las he disfrutado a partes iguales. Sí es cierto que la novela me resultó muy chocante por la forma tan peculiar que tiene nuestro protagonista de ver la vida, y eso hizo que me gustara mucho. Pero la película también me cautivó por la historia tan bonita y especial que tiene, y sobre todo por la forma de ser contada, que le hace ganar muchos puntos.

Por eso os diré que si tuviera que elegir solo una de las dos, me quedaría con la película, porque está muy bien conseguida, se me quedó grabada muy adentro y porque creo que es más fácil para vosotros que le déis una oportunidad a ella antes que al libro. Por tanto en este caso, y pese a no ser lo normal, voy a dar por ganadora a la película. Así que ahora todos a verla.


Nos leemos.

miércoles, 1 de marzo de 2017

Rojo y oro (Reseña)

    Título: Rojo y oro

    Título original: Rojo y oro

    Saga: No

    Autoras: Iria G. Parente y Selene M. Pascual

    Editorial: Alfaguara

    Nº Páginas: 448

    Precio: 16,95 €




Orión está cansado de ser el esclavo de Hera desde que su madre, la diosa del Caos, fue condenada por su ambición. Hera le ha tratado siempre más como un criado que como el dios que es. Y quiere que eso acabe. Asteria está cansada de luchar. Desde que el pueblo de las amazonas fue arrasado hace años, ella y sus hermanas viven esclavizadas y obligadas a servir al Emperador de Élada como gladiadoras. Y quiere que eso acabe.

El mundo de Orión es dorado como solo puede serlo la grandeza de los dioses; el mundo de Asteria es rojo como solo puede serlo la sangre que derrama cada día. Ambos buscan venganza hacia quienes los encadenaron en esos mundos. Ambos buscan libertad, y harán lo que sea necesario para conseguirla.





Para empezar, nos encontramos en una novela ambientada en la mitología griega en la que existen dos mundos muy diferentes, el Mundo Superior donde viven los dioses y el Mundo Medio, el de los mortales. Y como bien sabréis, estos están bajo el mandoto de Zeus, que gobierna como rey junto a su mujer, la diosa Hera. Una vez puestos en situación, tenemos a nuestro protagonista Orión, el dios de la vida, que aunque ostente ese poder, lo cierto es que carece de ella, pues lleva toda su vida viviendo como un esclavo bajo las órdenes de la reina Hera, que lo trata como a la peor escoria y hace con él lo que quiere.

Iria G. Parente y Selene M. Pascual

Es por ello que Orión decide idear un plan para así librarse de las garras de su captora, recibiendo la ayuda de otros dioses que están cansados de la tiranía de Hera, ya que esta gobierna a su antojo y voluntad. Debido sobretodo a que Zeus prefiere pasearse por el mundo medio conquistando jóvenes mortales que sentarse en su trono y tener que lidiar con su esposa. Pero para llevar a cabo su plan, Orión va a necesitar la ayuda de alguien que lo pueda defender y que además pueda darle algo a cambio, y es por eso que va en busca de Asteria, la amazona más famosa de todo el imperio por no haber sido nunca derrotada en combate.

Nuestra otra protagonista, Asteria, lleva años luchando a vida o muerte para entretenimiento del emperador y del imperio. Desde que su pueblo fue saqueado y apresado años atrás por el imperio, ella lucha cada día con la intención de liberar a sus hermanas, pues tiene un trato con el emperador mediante el cual por cada batalla que gane, por muy dura que sea, una de las suyas es liberada y devuelta a su hogar. Es por ello que pasa su triste vida matando a sus contricantes en el anfiteatro con el sueño de que algún día consiga liberarlas a todas, a sabiendas de que ella nunca podrá salir de allí.

Ambos van a unirse para luchar juntos y cambiar su situación, pues la idea de Orión es liberar a su madre Eris, la diosa del caos para que esta derrote a Hera y cambien las tornas de una vez por todas. Pero el problema es que él, como dios de la vida, es incapaz de luchar ni hacer daño a nadie y es por eso que necesita la ayuda de Asteria, para protegerlo y para que luche contra todos los obstáculos que se pongan en su camino. Aunque ambos van a tener problemas para entenderse en su nueva alianza, pues Asteria es una chica con genio, valiente y decidida, y por el contrario Orión es un dios miedoso y asustadizo.

Nos encontramos pues con dos personajes muy distintos pero al mismo tiempo muy bien definidos, y eso es algo que se agradece, ya que además no siguen ningún prototipo a los que estamos acostumbrados. Además evolucionan bastante a lo largo de la novela, pues aunque Orión parezca un cagado que no sabe hacer nada solo y Asteria una chica dura sin sentimientos, poco a poco vamos conociendolos mejor y vamos viendo como sus vivencias les hacen enfrentarse a las cosas de otra manera. La verdad es que me han sorprendido y me han gustado bastante ambos, aunque al principio no me entusiasmaban demasiado.

Por otro lado, quiero destacar la trama y la ambientación de la novela, que son sencillamente fantásticas. Encontrarnos rodeados de dioses y sus historias es algo que me fascina y además ver la relación que hay entre ellos lo hace mucho más interesante. Las autoras han sabido perfectamente coger esa esencia y darle un carácter muy personal y vida a los antiguos dioses griegos, y eso hace que te metas de lleno en la historia y vivas sus problemas con ellos. Además la novela está cargada de acción y de aventuras que van viviendo los personajes para alcanzar sus metas.

Dejando esto a un lado, os tengo que contar que para mí la lectura de la novela tiene dos partes muy diferenciadas y os explico por qué. Cuando empecé a leer el libro, me enganché muy rápido a la historia porque me fascinaba y porque no dejaban de ocurrir cosas todo el rato, tanto era así que no podía dejar de leer. Pero a la mitad más o menos del libro, la trama se estanca un poco, el ritmo baja y las cosas empiezan a desarrollarse mucho más despacio, centrandose más en las relaciones y problemas de los personajes. Y aunque me gusta conocer mejor a los personajes y lo que les pasa, creo que esa parte en la que no ocurre casi nada hace que la lectura se realentice y que le haya hecho perder puntos, pues ya no te mantiene tan enganchado.

De cualquier manera, estamos ante una novela de las buenas, de las que te dejan un grato recuerdo y de las que no me voy a cansar de recomendar. Una novela autoconclusiva con una historia y unos personajes muy potentes y con un final que es sencillamente perfecto. Si os gusta el tema de la mitología y las historias de aventuras, estoy seguro de que os vais a quedar fascinados. Por mi parte, me quedo muy contento de haber dado una oportunidad y conocido la prosa de las autoras, ya que estoy seguro de que no va a ser el único libro suyo que lea.


Amor: ***
Misterio: ***
Agilidad: ****
Acción: ****
Trama: *****


Nos leemos.

domingo, 5 de febrero de 2017

Excalibur Britannia (Reseña)

    Título: Excalibur Britannia

    Título original: Excalibur Britannia

    Saga: Britannia (1/4)

    Autores: Ana Alonso y Javier Pelegrín

    Editorial: SUMA

    Nº Páginas: 368

    Precio: 17,90 €




Gwen es la hija de la reina Igraine y Lance es un caballero de la corte. La princesa, heredera del trono, está en apuros porque los sajones han entrado en Londres y quieren conquistar el reino.

Merlín (el famoso mago) y Uriens han trazado un plan para que la princesa escape sana y salva. Pero en la oscuridad de la ciudad, tras cada esquina, los espías de los sajones están al tanto de una maniobra de salvación que puede que sea más complicada de ejecutar de lo que al mago le parece...





Nos encontramos en el comienzo de una saga ambientada en las leyendas del rey Arturo y por tanto, gran parte de los personajes que aparecen y sobretodo los principales, nos suenan ya por haber oído hablar de ellos en los cuentos, libros y películas sobre las leyendas artúricas. Y como no podía ser de otra forma, nuestros personajes principales son por tanto el mismo Arturo, sir Lancelot y Gwen, la hija de la reina Igrainne. Pero que nos encontremos en este mundo no quiere decir que ocurra lo mismo que en las leyendas, ya que en esta historia las cosas suceden de forma bastante diferente a la que ya conocíamos.

Ana Alonso y Javier Pelegrín

Gwen es la princesa y legítima heredera al trono de Britannia, por lo que se encuentra en el punto de mira de los sajones, que se están apoderando poco a poco de las tierras británicas dejando al ejército inglés con una mano delante y otra detrás. Es por eso que la princesa va a tener que emprender un viaje de huida hacia tierras más seguras, aconsejada por el gran mago Merlín, que siempre ha velado por ella cuando más lo ha necesitado. Y quien la va a tener que acompañar es nada menos que el mismísimo Lancelot, un hombre extranjero al que no conoce de nada y que además no le va a caer demasiado en gracia.

Por otro lado, la novela cuenta con un gran factor añadido, la fantasía. Y es que en Britannia, todos se encuentran bajo un velo mágico que les permite ver una distorsión del mundo real mejorada, es decir, que al tomarse una especie de gemas, su visión cambia y todo lo que les rodea adquiere un tono más colorido, las cosas tienen mayor gusto, el dolor se siente menos, etc. Nos encontramos pues en una especie de mundo paralelo en el que la vida es mucho más placentera y todo está mejorado, aunque eso tenga también sus pequeñas pegas, pues solo los más ricos tienen acceso a las mejores gemas que les permiten una conexión óptima, mientras que otros tienen que mendigar por otras que apenas tienen los mismos beneficios.

Lo que hace especial a nuestra princesa, es que es capaz de alterar el velo de Britannia en pequeña medida modificandolo a su antojo, aunque al mismo tiempo es un riesgo para ella si alguien se entera que tiene ese poder. Por ello hasta ahora, solo lo ha utilizado para ponerse más guapa o cambiarse de vestido a su antojo, pero con la nueva situación a la que se enfrenta, va a tener que aprender a utilizarlo si quiere salir bien parada y evitar que la maten. Aparte del hecho de que va a tener que empezar a convertirse en una verdadera princesa que no solo sepa hablar de temas de la corte.

Para empezar, nos encontramos con un comienzo un poco confuso, pues la historia empieza de forma muy repentina, con muchos personajes ya sobre la mesa y con la trama en un punto álgido. Y eso es algo que me ha descolocado un poco, pues aunque me gusta que los libros empiecen fuerte y con acción desde el principio, para esta historia necesitaba conocer un poco más el contexto antes de saber qué estaba ocurriendo. Pero bueno, una vez que hemos pasado esas primeras páginas y vamos avanzando en la lectura, nos vamos metiendo más de lleno en la historia y esos problemas desaparecen.

En cuanto a la trama, me ha gustado bastante el hecho de que nos encontremos en la época artúrica en la que aparezca el mago Merlín y todos los personajes de las leyendas, pues ese mundo épico me fascina. Y eso, junto con el toque fantástico que le han dado los autores al introducir el velo mágico de Britannia, mediante el cual los personajes pueden ver el mundo de otra manera, me ha parecido todo un acierto, ya que permite dar a la historia un enfoque mucho más original y que se pueda jugar más con la trama.

Pero he de decir que no todo en esta reseña ha sido positivo, y es que en esta historia los personajes me han fallado bastante. No podría deciros un motivo enorme que me haya hecho odiarlos ni nada por el estilo, solo que no he podido conectar con ellos. Para mi gusto, son unos personajes demasiado planos con los que es muy difícil empatizar, y aunque sí van evolucionando y mejoran a lo largo de la historia, siguen sin ser demasiado característicos ni profundos, y no he llegado ni siquiera a cogerles cariño. Me dí cuenta hasta tal punto que, en el triángulo amoroso que hay en la novela, no sabía decantarme por ninguno de los dos personajes, pues son tan parecidos y poco llamativos que no hay nada que incline la balanza hacia un lado u otro.

También es cierto que el ritmo de la novela no es tan rápido como esperaba al principio, pues aunque no dejan de ocurrir cosas y es bastante entretenido, tampoco me he quedado pegado a las páginas necesitando saber como continuaba la historia. Es por eso que a pesar de gustarme mucho los autores, tengo sentimientos encontrados con este libro, y aunque el balance final es positivo, no tengo muy claro si voy a seguir leyendo la saga, pues no me ha dejado tan convencido como para leer tres continuaciones. A pesar de eso, os animo a que le déis una oportunidad si os gusta la fantasía épica, pues el libro no está mal y así podemos compartir opiniones.



Amor: ***
Misterio: ***
Agilidad: ***
Acción: ***
Trama: ***



Nos leemos.