Media guerra (Reseña)

    Título: Media guerra

    Título original: Half a War

    Saga: El mar quebrado (3/3)

    Autor: Joe Abercrombie

    Editorial: Fantascy

    Nº Páginas: 448

    Precio: 18,90 €

La princesa Skara ha sido testigo de cómo todo lo que amaba se convertía en sangre y cenizas. Al ser la única superviviente de su derrotada dinastía, deberá vencer la aflicción y el terror, afilar la mente y luchar por Throvenlandia como reina. El padre Yarvi ha recorrido un largo camino y ha pasado de esclavo tullido a poderoso clérigo. Ha conseguido que sus antiguos enemigos se vuelvan sus aliados y ha logrado la paz, aunque inestable. Pero ahora la abuela Wexen ha levantado el mayor ejército que se ha visto desde que los elfos se enfrentaron a Dios.

Todos se preparan para la batalla que se está gestando; entre ellos Raith, el portador de la espada de Grom-gil-Gorm. Para él, la presencia de Skara es como un bálsamo para sus heridas. Y Skara, a su vez, detecta sorprendida que la sonrisa de Raith es como una llama capaz de caldear la noche más gélida.

Algunos han nacido para luchar, quizá para morir. Otros prefieren vivir en la luz. Pero cuando la Madre Guerra extiende sus alas, amenaza con sumir todo el mar Quebrado en la oscuridad más profunda.

Trilogía el Mar Quebrado
#1 Medio rey
#2 Medio mundo

La lucha final esta cada vez más cerca y los nervios y tensiones entre los reyes y sus clérigos están a flor de piel. En este contexto de alianzas, Gettlandia y Vansterlandia ponen todos sus esfuerzos en intentar estar unidos, pues no está siendo nada fácil mantener la unión entre dos pueblos eternamente enfrentados y sobretodo entre dos reyes que han sido siempre rivales y enemigos. Por suerte tenemos al padre Yarvi, el hombre más astucioso de todo el Mar Quebrado para encargarse de que siga esa unión y de mover todos los hilos necesarios para conseguir más apoyo en la guerra que se aproxima.

Joe Abercrombie

En este contexto nos encontramos con nuevos personajes que se encargan de dar voz a esta historia, como ya viene siendo habitual en la trilogía. En primer lugar tenemos a Koll, el joven grumete que aparecía ya en el libro anterior y que esta vez se está preparando para convertirse en clérigo junto al padre Yarvi, aunque no se siente seguro de nada de lo que hace, pues en realidad siempre ha sido muy miedoso y le va a costar enfrentarse a todo lo que le está por venir. Además parece que el amor ha llamado a su puerta en el momento menos oportuno, pues una vez que haga el juramento de clérigo tendrá que renunciar a cualquier tipo de relación por muy enamorado que esté.

Por otro lado tenemos a Skara, la princesa de Trovenladia, que después de sufrir una enorme humillación y de ver morir a toda su familia, ha decidido unirse a las tropas del padre Yarvi, sumando su reino al de sus dos vecinos. Aunque no les sirva de mucha ayuda, pues este ha quedado completamente devastado y no cuenta casi con guerreros que le puedan ser útiles en la batalla, sabe que ahora ella debe velar por los que quedan y va a luchar por vengarse de aquellos que le han destrozado todo lo que tenía.

Y también tenemos a Raith, el portaespadas del rey Grom-gil-Gorm, un sanguinario asesino que se ha curtido en el arte de la guerra y que siempre ha sido la mano derecha de su rey. Pero que por malabares del destino ha acabado convirtiendose en la niñera de la princesa Skara, demasiado débil como para dejarla sin protección. Por otro lado, él siempre ha tenido que ocuparse de proteger a su hermano gemelo, así que ahora tiene tarea doble. Por suerte, parece que le está sentando bastante bien haberse alejado del huraño rey de Vansterlandia.

Entre los tres vamos a tener una amplia visión de lo que está ocurriendo en todo momento en los distintos puntos del Mar Quebrado. Como en los anteriores libros, los personajes tienen una gran evolución a lo largo de la novela y eso es algo que siempre se agradece. Sobretodo me ha gustado mucho la princesa Skara, que empieza siendo una niña asustada que crece de una manera bestial adaptándose a las circunstacias que le ha tocado vivir y que ha acabado sorprendiendome bastante. Aunque es cierto, que en líneas generales, estos han sido los personajes que menos me han gustado de los tres libros y es que no he llegado a empatizar del todo con ellos.

Sintiendolo mucho, este ha sido para mi el libro más flojo de la trilogía, ya que esperaba un libro apoteósico donde por fin estallaran todos los conflictos que se debían resolver y en el que me encontrara una lectura de esas que no puedes soltar, y no ha sido del todo así. En primer lugar he de decir que no me ha hecho mucha gracia el hecho de tener que conocer a nuevos personajes y ver como van evolucionando, ya que eso me gustó mucho en los otros libros, pero en este, que era el desenlace de la saga, no esperaba tener que volver a vivirlo, sino entrar ya en el meollo del asunto y resolver todo lo que había quedado abierto en la trama con los otros personajes.

En segundo lugar, otro gran fallo es que la primera parte de la novela transcurre sin mucha miga, no ocurre casi nada y no tiene apenas acción, y aunque no se me hizo pesada, si es cierto que no me enganchó tanto como hace siempre Abercrombie. Esa es otra de las pegas que le he visto, y es que aunque poco más tarde sí empieza el desenlace que sigue hasta el final de la novela, me ha faltado que todo el libro fuera así de vertiginoso y que me fuera sorprendiendo tanto o más como lo hicieron los anteriores, cuando no ha sido así.

Pero bueno, dejando esto de lado voy a pasar a hablaros de las cosas buenas, que al fin y al cabo superan a las pegas que le he podido encontrar. En general es una novela que me ha gustado mucho, ya que una vez que pasas las ciento cincuenta primeras páginas empieza el gran desenlace y todo se vuelve frenético. Las mentiras, los engaños y las tretas siguen siendo el punto clave para la batalla de nuestros personajes y eso es algo que me encanta de esta saga y que no puedo dejar de aplaudir. Como siempre dicen hay que mirar por el mal mayor, dejando atrás el mal menor.

Como final de saga, me ha parecido sencillamente perfecto y no podría estar más contento con el desenlace de esta historia. Como siempre, el escritor ha sabido darle su toque peculiar al final de la historia y la ha llevado a su terreno y eso es algo que me fascina. Sí es cierto que este ha sido el libro más flojo de la trilogía para mi gusto, pero eso no quita el hecho de que también me haya gustado y lo haya disfrutado un montón. Así que desde aquí os recomiendo que si teneis la ocasión le deis una oportunidad a Abercrombie y al Mar Quebrado, que estoy seguro de que os va a gustar.



Amor: ***
Misterio: ****
Agilidad: ****
Acción: ****
Trama: ****

Nos leemos.