Diario del búnker (Reseña)

    Título: Diario del búnker

    Título original: The bunker diary

    Saga: No

    Autor: Kevin Brooks

    Editorial: Destino

    Nº Páginas: 304

    Precio: 15,95 €

Linus, un joven de dieciséis años, se despierta atontado en un búnker. Lo han secuestrado. No entiende por qué. Nadie se comunica con él. Su único contacto con el exterior es un ascensor que baja cada mañana con provisiones. Días más tarde en el ascensor aparecen otras personas a las que también han secuestrado.
No tienen nada en común entre ellos. ¿Qué quiere el secuestrador?

<<10.00 de la mañana.
Esto es todo lo que sé, que estoy en una vivienda de techo bajo, rectangular, toda ella de hormigón encalado. Debe de medir unos doce metros de ancho y dieciocho de largo. Un pasillo la divide en dos, y de la mitad de este sale un segundo pasillo que termina en un ascensor. 
No hay ventanas. Ni puertas. Solo se puede entrar y salir en ascensor.>>

Así es con el panorama con el que se encuentra Linus nada más abrir los ojos, después de haber sido golpeado y drogado por un hombre ciego en la calle, al que intentó ayudar y que resultó ser un completo impostor, que consiguió bloquearlo y echarlo cual saco al camión en apenas unos segundos.

Kevin Brooks

Linus no entiende nada de lo que le está pasando. Se encuentra encerrado en una especie de búnker, donde la única conexión con el exterior parece ser un ascensor totalmente sellado. Además, hay seis habitaciones, un baño y una cocina, y todos ellos se encuentran bajo la vigilancia de diferentes cámaras de seguridad repartidas por todo el lugar, sin posibilidad alguna de esconderse del objetivo.

Cuáles son las razones por las que está allí, quién lo ha encerrado y qué planea hacer con él son preguntas que no tiene manera de contestar y que empiezan a atormetarle cada vez más. Sabe que él no es un chico cualquiera, pues es el hijo de un importante empresario al que muchos conocen; aunque últimamente Linus vivía en la indigencia, pues no soportaba más el tener que vivir bajo el ojo constante de un hombre que ni le cuidaba ni le dejaba vivir su vida.

Pero la soledad de nuestro protagonista se ve truncada desde el momento en que se abre el ascensor y se encuentra dentro con una niña maniatada e inconsciente. Y además, no es la única compañía que va a tener, ya que parece ser que el búnker va a contar con varios inquilinos, a cada cual más diferente y singular. Por otro lado, todos los días a la misma hora baja el ascensor con toda la comida y las peticiones que le hacen sus inquilinos, siempre y cuando se hayan portado bien y no hayan hecho ningún intento de fuga.

Nos encontramos con un libro escrito en forma de diario, en el que el protagonista nos va contando su experiencia gracias a una libreta en blanco que encontró en el escritorio de su habitación. A través de ella, podemos ir conociendo todas sus experiencias y sentimientos, lo que es un gran acierto, ya que el escritor consigue así que nos metamos de lleno en la historia y que sintamos esa sensación de claustrofobia y angustia que siente Linus al no saber donde se encuentra ni como salir de allí.

Este es sin duda alguna el punto fuerte de la novela y lo que más me ha gustado, cómo el autor consigue meterte tan de lleno en la historia, provocando todo tipo de sentimientos y haciendo sufrir al lector en los momentos oportunos. Además, todo ese aire de misterio e intriga que envuelve la novela hace que sea casi imposible dejar de leer, y es que el libro da siempre los detalles mínimos y necesarios para que no te enteres de nada pero que a la vez pienses que estas cerca de descubrirlo todo.

Es cierto que no nos encontramos con un libro muy dinámico en el que tengamos buenas dosis de acción ni en el que estén ocurriendo cosas nuevas ni giros argumentales continuamente, pero creo que esto es algo que el libro no necesita. Ya que de la manera en como está contada la historia, de una forma tan dura pero que a la vez parece tan real, es exactamente lo único que se necesita. Por eso me ha fascinado tanto las reacciones de los personajes a las diferentes cosas que les van ocurriendo, ya que son reacciones perfectamente creíbles que se podrían dar si ocurriera esto en la vida real.

Sin duda alguna, el colofón final es el desenlace de la novela, que estoy seguro de que os va a dejar a todos con la boca abierta. Me ha parecido sencillamente magnífico, aunque si es cierto que me habría gustado que fuera un poco diferente, pensándolo detenidamente es lo mejor que podía haber hecho el autor, ya que  le ha puesto la guinda al pastel de la mejor manera posible.

En resumen, este es un libro que hay que leer para poder opinar de él, ya que puede gustar más o gustar menos, pero si no te sumerges entre sus páginas y vives lo que sienten los protagonistas, no te puedes llegar a hacer una idea clara de qué tipo de novela tienes entre tus manos. Yo personalmente, os la recomiendo.



Amor: -
Misterio: *****
Agilidad: ****
Acción: ***
Trama: ***

Nos leemos.