Temor a la verdad (Reseña)

    Título: Temor a la verdad

    Título original: Daddy´s Gone a Hunting

    Saga: No

    Autora: Mary Higgins Clark

    Editorial: Plaza & Janés

    Nº Páginas: 368

    Precio: 21,90 €

Cuando el negocio de muebles antiguos de imitación que fundó su abuelo queda totalmente destruido a causa de una misteriosa explosión, Hannah Connelly se convierte en el pilar de la familia. Su hermana Kate sigue en coma tras haber logrado escapar de las llamas, y su padre parece todavía más abatido, desconcertado y dependiente del alcohol de lo que lo ha estado en los últimos tiempos. Pero la pregunta que urge contestar es: ¿qué hacía Kate en el lugar del accidente, de madrugada y acompañada de Gus Schmidt, un antiguo empleado «jubilado» contra su voluntad hace cinco años?

Las pesquisas de la policía apuntan claramente a un incendio provocado, el típico siniestro en el que el propietario de un negocio en decadencia trata de sacar provecho a la desesperada. Mientras Kate se debate entre la vida y la muerte, Hannah, empeñada en averiguar la verdad, no tardará en comprender que hay alguien decidido a que su hermana no recupere la consciencia.

La familia Conelly es la propietaria de una gran empresa de imitación de muebles antiguos de lujo que se consideran verdaderas piezas de arte. Pero en los últimos años, las ventas han decaído considerablemente y ya no es demasiado rentable.

A pesar de la quejas e insistencias de su hija Kate, Doug Conelly no está dispuesto a cerrar su empresa y vender el terreno, y eso ha provocado bastantes disputas en su familia. Aunque de todas formas, la relación de Doug con sus dos hijas, Kate y Hanna, nunca ha sido demasiado buena, debido al cambio de carácter de este cuando murió su mujer en un accidente de barco.

Mary Higgins Clark

Pero todo se precipita la noche en que se produce un incendio que acaba por completo con el edificio de la empresa familiar, y que misteriosamente coincide con una extraña reunión a horas intempestivas que estaban llevando a cabo Kate Donelly y un antiguo trabajador de la empresa, que por desgracia acaban muy mal parados, con la muerte de uno y el coma de otro.

Ahora es cuando empieza el extraño misterio por resolver ¿Qué hacían allí aquella noche la hija del presidente de la empresa, con un antiguo trabajador cuando se quemó el edificio? ¿Fue uno de ellos el que provocó el incendio y se fue de las manos para acabar así? ¿Fue un complot para conseguir cobrar el cuantioso seguro que permitiría a la familia embolsarse una millonada? ¿O fue pura coincidencia?

Hanna Conelly ha tenido la mala fortuna de ver como su querida hermana ha entrado en coma después de este fatídico desastre y no solo debe lidiar con eso, sino que además se ve superada por la gran cantidad de especulaciones que se están haciendo sobre la posible implicación de esta en el incendio, cuando ella sabe su hermana jamás sería capaz de tal cosa.

Por otro lado, se nos presenta otro caso totalmente diferente a este, en el que está presente la desaparición de una joven muchacha más de veinte años atrás, y de la que nunca se ha sabido nada. Pero con el traslado de su hermano a Nueva York, donde esta desapareció cuando vivía sola intentando cumplir su sueño de ser actriz, el caso va a dar un giro de trescientos sesenta grados, y se van a obtener nuevas pistas sobre a vida de esta pobre chica, a la que su familia no puede olvidar.

Tengo que decir que para ser la primer novela de Higgins Clark que leo, me he quedado mucho más que satisfecho. Llevaba tiempo queriendo echarle el guante a alguno de sus libros, y cuanto se me presentó la oportunidad de poder leer este, no lo dudé dos veces y empecé con él para acabar devorándolo en apenas tres días.

Ni que decir tiene que me ha gustado muchísimo. Se nota mucho que la autora tiene mucha experiencia en este tipo de libros, porque nos ofrece una trama enrevesada en la que nada parece tener ninguna conexión, pero que finalmente todo tiene relación. Además la manera que tiene de unir las diferentes historias me ha gustado mucho y es bastante creíble, no como suele ocurrir en muchos casos. En cuanto al misterio, el libro tiene grandes dosis de intriga y acción que te mantienen pegado todo el rato a la lectura. Además, al ser bastante cortito, se lee del tirón y no tiene partes repetitivas, pesadas ni aburridas.

También es cierto que le he encontrado alguna que otra pega al libro, como son los personajes. Para mi gusto, creo que les falta carisma, ya que, aunque se pueda ver más o menos su carácter, no los llegué a conocer a fondo, lo que hizo que no pudiera llegar a entenderlos del todo y que no me posicionara a favor de unos u otros, para después la autora poder sorprenderme con los culpables que yo jamás hubiera pensado.

En definitiva, nos encontramos ante una novela de intriga de las buenas, esas que te hacen querer seguir leyendo hasta el final y que te sorprenden con cada pequeños avance. Sin duda alguna Higgins Clark acaba de entrar en mi lista de escritores de novela negra imprescindibles.




Amor: **
Misterio: *****
Agilidad: ****
Acción: ****
Trama: ****

Nos leemos.